jueves, 10 de abril de 2014

Que tinguis sort

Tenía que llegar. Es normal y lo entiendo, siempre lo has dejado claro, pero la rabia que siento es tan grande... No quería cambiarte pero pensaba que serías capaz de hacerlo por mi, sin ir más lejos yo cambié por ti la norma de dejar que alguien volviera a entrar en mi vida de nuevo. No me había dado cuenta que el año pasado era feliz conociendo a un chico cada fin de semana, dejando que compartieran mis noches sin tener que preocuparme por ellos de día; el no querer a alguien, en serio, ¿hay mayor placer que ese? El no sufrir por si estás siendo demasiado pesada con alguien, o demasiado pasota; el no sufrir si no te contestan, o si están hablándote todo el día; el no sufrir cuando estás tantos días de viaje y no tienes manera de comunicarte con él. En serio yo era feliz, no quería cambiar y me hiciste quererte, sin querer.
Lo cierto es que sí hay mayor placer que ese: la manera en que me miras cuando estamos abrazados en la cama, cuando te ríes de mi (cuando es conmigo eso ya es una sensación inexplicable), cuando me pones esas caras para que te bese, cuando me das los buenos días y las buenas noches, cuando me haces rabiar (incluso entonces me encantas),... Joder hay tantos, y eso es tu culpa, yo no quería conocerte. Yo no quería quererte.
Que tinguis sort, la vas a necesitar, porque no saber querer es casi tan malo como no querer, amor.