miércoles, 31 de diciembre de 2014

P

Se me hace raro estar allí. Es curioso cómo me siento ahora después de haberme pasado toda mi vida jugando entre esas paredes, comiendo en esa cocina, jugando al ordenador en ese cuarto o charlando con la yaya en ese sofá. Es curioso como una casa que me proporcionaba toda la felicidad y seguridad del mundo me hace sentir tan sola y vulnerable.
Hoy cuando he pasado he visto el calendario que tenías detrás de la puerta de la cocina, ese típico con todos los santos apuntados y esas cosas. Te juro que se me ha parado el corazón cuando he visto que seguía en Abril. Te juro que me quería morir allí mismo porque sé que no vas a seguir pasando los meses. Te juro que nadie se acuerda tanto de ti como yo. Te juro que desde que ya no estas conmigo cada día se me hace más difícil y que va a ser muy duro empezar un 2015 sin ti. Te juro que va a ser una puta mierda seguir arrancando las hojas del calendario sabiendo que tú no estás en ellas, que no las arrancarás conmigo, que no voy a verte ni tocarte ni hablarte ni decirte cuantísima falta me haces.
Que te quiero.
Que como tú siempre te despedías, hasta cuando tú quieras.
Hasta cuando tú quieras yayo.

domingo, 18 de mayo de 2014

Llega el verano y se siente otoño


OTOÑO
Está llegando el otoño... el principio del fin... Primeras gotas de agua, primeras notas de polvo se posan encima nuestro amor, ya has conocido a mi ogro, ese que aparece poco, pero cuando viene te hace temblar, puedo beberme el bar, quebrar un amor resistente como el keblar. No sé de sorbos, sé de extremos, sé que nos tocamos menos, que ya no saltan chispas cuando nos vemos, que me cuesta acercarme y que estás distante, tú que siempre has sido mi confidente y amante, mi perfecto guante, ¿por qué mierda se difumina el afecto? ¿qué nos ha pasado en el trayecto? Nuestras bases sólidas hoy están afónicas, mientras cual será la próxima bronca, no hay arquitecto capaz de sustentar lo nuestro si hay grietas en el cemento. Lluvia en el cristal, hojas marchitas, mis noches malditas, mierdas gratuitas, mientras tú más fuerte me gritas, portazos, tú en la habitación ¿cómo puedo no consolarte? Dejarte a solas, orgullo, enfado, no habían entrado aquí hasta ahora. ¿Desde cuándo he necesitado espacio? ¿o tú? Si llenas mi vacío bable, mis reacios al tabú, nos hace falta tanta o más que un guiño, ¿por qué nos falta aliño? No entiendo mi cielo, mi amor, mi cariño... Mi luna y mis estrellas, así te conozco, todo empieza a ser más tosco más a menudo, tú dudas, yo dudo, si desde que te vi he sido tuyo, intuyo que te vas ha marchar, mi corazón esta mudo, desudo, tirado en el felpudo, lo arreglamos, sonríes, mis pies vuelan, segundos contigo son rubíes más que Saudíes tengan, así es, venga, juntos podemos con todo, pero después de un corto periodo algo en el aire sienta incómodo. Yo cada vez más lejos, tú cada vez más triste, nuestro lazo cada vez más viejo, siento lo mucho que sufriste, fue un despiste, tienes que creerme... (Otoño) Finales de septiembre... Lluvia en el cristal, hojas marchitas, mis noches malditas, lluvia en el cristal, mientras tú más fuerte me gritas, lluvia en el cristal, ¿cómo no puedo no consolarte?, dejarte a solas, orgullo, enfado, siento lo mucho que sufriste, lluvia en el cristal, hojas marchitas, ¿Qué nos ha pasado en el trayecto? lluvia en el cristal, ¿Por qué mierda se difumina el afecto? lluvia en el cristal, mi perfecto guante.
 Yo cada vez más lejos, tu cada vez más triste.

ZPU

miércoles, 14 de mayo de 2014

Small and smaller

Quiero llamarte. No debo.
Quiero verte. No puedo.
Quiero llorarte. No lo mereces.
Quiero gritarte. No escucharías.
Quiero que vuelvas. No acudirías.
Quiero dormir contigo. No me dejarías entrar.
Quiero no dormir contigo. No me harías caso.
Quiero abrazarte. No me darías mas que la espalda.
Quiero preguntarte. No responderías.
Quiero sonreírte. No mirarías.
Quiero que me quieras. No me quieres.
Quiero. No quieres.

No quieres y no me quieres.
Hoy me he acordado del momento en que estuve segura de que yo sí te quería (todo lo segura que contigo se puede estar, claro) y ojalá, a pesar de todos los buenos recuerdos que me has dado, no hubiera llegado nunca.




Mentira. I keep feeling small and smaller... Without you.


jueves, 10 de abril de 2014

Que tinguis sort

Tenía que llegar. Es normal y lo entiendo, siempre lo has dejado claro, pero la rabia que siento es tan grande... No quería cambiarte pero pensaba que serías capaz de hacerlo por mi, sin ir más lejos yo cambié por ti la norma de dejar que alguien volviera a entrar en mi vida de nuevo. No me había dado cuenta que el año pasado era feliz conociendo a un chico cada fin de semana, dejando que compartieran mis noches sin tener que preocuparme por ellos de día; el no querer a alguien, en serio, ¿hay mayor placer que ese? El no sufrir por si estás siendo demasiado pesada con alguien, o demasiado pasota; el no sufrir si no te contestan, o si están hablándote todo el día; el no sufrir cuando estás tantos días de viaje y no tienes manera de comunicarte con él. En serio yo era feliz, no quería cambiar y me hiciste quererte, sin querer.
Lo cierto es que sí hay mayor placer que ese: la manera en que me miras cuando estamos abrazados en la cama, cuando te ríes de mi (cuando es conmigo eso ya es una sensación inexplicable), cuando me pones esas caras para que te bese, cuando me das los buenos días y las buenas noches, cuando me haces rabiar (incluso entonces me encantas),... Joder hay tantos, y eso es tu culpa, yo no quería conocerte. Yo no quería quererte.
Que tinguis sort, la vas a necesitar, porque no saber querer es casi tan malo como no querer, amor.

lunes, 24 de marzo de 2014

Ahí debajo

Es extraño y difícil saber que no estás pero que todavía no te has ido. No has dado un portazo, ni siquiera has dicho adiós y así es muy complicado saber cuando tengo que despedirme. Sé que es mi turno, ojalá fuera capaz de dar un puñetazo en la mesa, levantarme, salir por la puerta y dejarte ahí sentado. Lo que no sabes es que iría todo el camino de vuelta a casa con la cabeza girada, y no lo sabes porque sé que a pesar del dramatismo de la escena no me mirarías ni una sola vez. 
Ya no sé si es porque realmente no quieres mirar o porque te da miedo o porque sí. No lo sé y tú no me lo dices. No quiero ser de esas que se mienten a sí mismas inventándose mil excusas inverosímiles de por qué un chico no las ha llamado, no pienso ser así. Me niego a ser así. Pero es que tampoco me ayudas a ver las cosas de manera diferente.
Voy a hacer lo que me dijiste, no te voy a esperar. Nunca he esperado nada de ti, de hecho, porque siempre me has dejado claro que no me querías, que no querías y que no sabes querer. Me lo has dejado claro y lo has demostrado. Y te has ido.

Pero a pesar de todo estás aquí, cuando me toco el pecho; sigues ahí debajo, como enquistado, como infectado. 
Y yo sigo aquí arriba, como embobada, como estancada.

miércoles, 5 de febrero de 2014

Siguen sin mucho sentido

Y la vida siguió, como siguen las cosas que no tienen mucho sentido. Porque eso es lo que hay que hacer.
Cuando esperas algo que no llega, que te niegan o simplemente cuando tus expectativas no se corresponden con la realidad; eso es lo que hay que hacer, seguir. Y parece fácil pero es lo más jodido del mundo cuando te imaginas cómo van a ser las cosas o cómo quieres que sean y todo se vuelve del revés otra vez.
Lo único que puedes hacer es dar gracias por los buenos momentos, guardarlos dentro de ti y sacarlos para sonreír. No hay más.
Pero a veces seguir es la mayor de las decepciones. A veces los puntos seguidos saben a puntos finales.

Y lo que me jode es que te echaré de menos cuando tú ni siquiera te acuerdes de mi nombre, que te recordaré diciendo que encontraré a otro mejor cuando ya he encontrado al que yo quiero. Como siempre.

jueves, 30 de enero de 2014

La soledad es eso

"Porque la soledad es eso:


Es no preparar café para dos,
en el desayuno.
Es no cambiar las sábanas,
de la cama,
tan a menudo.
Es no sonreír 
de madrugada.
Es recordar
como arañándote.
Es tener los ojos expectantes,
de ver llegar a alguien
que quiera dártelo todo:

primero un abrazo,
y luego un sentido.

Pero la soledad es eso.

Quedarse esperando, a donde sea, no importa cuándo.
Quedarse esperando, aunque joda.
Porque esperar nos recuerda
que estamos solos.
Porque después de la tormenta
siempre llega
la calma.

Y, piensas, quizá después de la soledad
encontremos a alguien 
cuyos ojos al vernos brillen
como cuando sale el sol
entre las nubes.

Pero la soledad es eso: una putada. 
La canción favorita de la tristeza."