Parece que no te has ido,que aún sigues aquí... Y aunque en cierto modo siempre vas a estarlo,no se puede parar el mundo. Tiene que salir y aprender a vivir sin ti. Lo está haciendo muy bien,te sentirías orgullosa.
Yo no he vuelto a vuestra casa,se me caerían las paredes y el Techo de menos Que la cubre. Mi madre dice que tengo el síndrome de diógenes porque lo guardo todo,pero para mi cada cosa no es simplemente eso. Puedo abrir un cajón y encontrar la figurita de un muñeco de nieve y sé exactamente que me salió en el roscón de reyes en el que D me rompió mi Ken favorito (pobre Barbie...tuvo que vivir con el Ken más guapo tullido); o encontrarme con una pajita que no es sólo eso,sino que era el micrófono improvisado con el que en la primera quedada que hicimos de la carrera cantábamos la canción de los Black Eyed Peas...
Si fuera a tu casa el infarto cerebral por el exceso de recuerdos (todos buenos siempre) me haría estallar la cabeza y lo pondría todo perdido de dolor.
Y ese es un color muy feo...
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